martes, 15 de febrero de 2011

SIGNIFICADO DE LA PALABRA "CHOLO"

Por:
Cholo es un insulto racista utilizado para despreciar a nuestros pueblos nativos de las américas, desde Chile hasta Canadá. Fue inventado por los hispanos en el siglo XVII para burlarse de la apariencia física de los indígenas de este continente.

Algunos peruanos se auto califican como cholos porque no saben que esa palabra es un insulto. Hay peruanos que usan esa palabra como una muestra de "amistad" o cariño. Sin embargo, la mayor parte de peruanos sabemos que es una palabra ofensiva.

Este es el origen verdadero de esa palabra.

Aunque los idiomas evolucionan y cambian, hay ciertas palabras cuyo significado perdura con el tiempo, por su naturaleza y origen. Los insultos usualmente siempre arrastran sus ofensivos significados a través del tiempo.

Cholo nació como un insulto

Deriva de Xoloitzcuintli, palabra del idioma indígena Náhuatl, que se habla hasta hoy en México y parte de Centro América. Se pronuncia sholoitscuintli y es usada para describir a los "perros sin pelo" que son
originarios de México y que era sagrado para los indígenas, similares a los que existen en Perú.

En los primeros años de la invasión europea de nuestro continente, los hispanos utilizaron el diminutivo xolo o "perro mexicano" como un insulto para describir a los indígenas mestizos, es decir los hijos de nativos con españoles.

Con el tiempo la palabra castellanizada "cholo" se esparció por las rutas de navegación del Caribe. Así lo registra el cronista Garcilazo de la Vega en su libro "Los Comentarios Reales" publicado en 1609 y en 1616:

"Cholo es vocablo de las islas Barlovento; quiere decir perro, no de los castizos, sino de los muy bellacos gozcones; y los españoles usan del por infamia y vituperio".

Las islas Barlovento se ubican en el Caribe. El término cholo se usaba para despreciar a los indígenas mestizos como si fueran perros chuscos, sin pureza de raza y sin cabellos. Parece que los españoles se habían olvidado que ellos mismos son mezcla de árabes, africanos, europeos.

No importa lo que diga el diccionario de la academia de los hispanos (RAE), el castellano de los peruanos es diferente al de los hispanos. Lo cierto es que hoy en día la palabra cholo se usa en casi todas las Américas desde Chile hasta Canadá y mayormente se conoce como una expresión despectiva.

Se utiliza cholo para describir u ofender a alguien con desprecio y esta relacionada a la raza, la apariencia o costumbres de una persona. Los diminutivos cholito y cholita también son usados en forma ambivalente.

En la música peruana, algunos se refieren a cholo como una descripción del peruano indígena. Luis Abanto Morales canta "cholo soy y no me compadezcas", una expresión que muchos indígenas peruanos consideramos conformista y resignada. El jugador peruano de futbol Hugo Sotil, fue obligado por los periodistas deportivos a renunciar a su primer nombre para ser llamado simplemente el cholo debido a su raza.

En Bolivia se llama cholitas a las mujeres de los valles interandinos y rurales. En Sur América esta palabra se usa para describir a las personas del campo, los paisanos, los campesinos, los indios de piel oscura. En varios países los peruanos migrantes son insultados como cholos, por desprecio a nuestra raza nativa.

En Perú se usa cholo para describir lo "popular", lo chabacano, lo que no es refinado o sea lo marginal y popular, siempre como un nivel inferior. El ex-presidente Alejandro Toledo era llamado choledo con desprecio, haciendo burla de su raza indígena.

En cualquier discusión o disputa violenta entre peruanos, quien quiera "ofender" al rival usará cholo como insulto. La choledad o cholería es un grupo de cholos o la cultura de los cholos; y cholear o hacer el cholito es una acción de ofender, burlarse o engañar a alguien.

En EEUU, México y Centro América cholo es un término ofensivo usado para describir a alguien que luce mal en su aspecto exterior, y es un delincuente de la calle, sea hombre o mujer. Es una palabra racista en cierta forma similar al insulto naco.

Algunos jóvenes mexicanos y chicanos utilizan esa palabra para definir su masculinidad o matonería, imitando como un paralelo a los afro estadounidenses que usan el insulto nigga, derivado de nigger.

Ser cholo también es una expresión urbana en varios países y se usa para describir a una sub cultura juvenil, que lidea con la poca autoestima. Ser cholo es ser un delincuente, matón o marginal. Algunos los relacionan con personajes clandestinos de las cárceles de California de los 1960's. Para muchos jóvenes involucrados en las pandillas, ser cholo es importante para que los demás les tengan respeto o miedo en todo caso.

Hay ahora incluso una moda clandestina de vestir, de hablar, de comportarse. Ser cholo es ser un gángster, un vato, un pandillero. A veces también es ser un galán, un gigoló y un tipo violento.

Los peruanos no somos perros chuscos

La palabra cholo es producto de la falta de tolerancia a la diversidad cultural de la nación peruana. Es una palabra que no define nada positivo y por ello debemos descartarla.

No importa que se intente darle un sentido positivo, amigable o gracioso. Lo cierto es que dentro de nosotros sabemos, los peruanos sabemos que es un insulto racista y que está dirigido sobre todo a los indígenas peruanos y los indígenas urbanos o mestizos.

El cholo es también para los blancos, un indígena o indio que habiendo llegado a la ciudad, ahora intenta ser como el resto y alejándose de sus costumbres, termina a veces menospreciando a sus propios parientes tradicionalistas.

Es difícil es controlar el uso de los insultos, porque es parte del lingo común sobre todo entre los jóvenes sin autoestima, los borrachos, los matones, los amargados, machistas y pesimistas.

Pero como formalidad de comunicación, el insulto cholo es una muestra de los errores que cometieron nuestros antepasados. Es facil pedir que cada quien le dé el significado que quiera, como opción individual. Pero parte de esa opción es no ofender el derecho de otros.

Los peruanos como sociedad diversa, debemos evitar usar insultos racistas en todo lugar. No debemos promover la ofensa disimulada en nuestra cultura, medios, libros, películas, música, etc. Debemos recordar que existe una relación directa entre el orgullo nacional y el progreso de los pueblos, por eso podemos fomentar nuestra nacionalidad usando un insulto racista.

Para progresar como sociedad, Perú necesita promover la autoestima y el respeto a la diversidad racial y cultural entre sus ciudadanos. Necesitamos evolucionar, educarnos y apostar por una sociedad progresista, pero sin perder la perspectiva de nuestros dignos orígenes.

El uso del insulto cholo debe ser evitado por los peruanos, por ser una palabra que simboliza la opresión de nuestros ancestros, el conformismo derrotista de algunos peruanos, y el racismo disimulado que todavía existe en Perú.

Fuente: Blog Peruanista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario